Las mejores sombras para esconderte del sol de Madrid

Hay veces que las sombras se convierten en un preciado refugio que todo el mundo busca. Para leer, pasear o meditar al aire libre sin que tu piel sufra desastrosas consecuencias

Parece que todo el mundo vive buscando el sol. Ya sea suspirando por él en los meses de invierno o echándose a las calles y a la playa en verano, los seres humanos somos incapaces de resistirnos a las bondades y la energía que nos transmite. Sin embargo para todo hay un momento y un lugar, y todo aquel que sabe disfrutar del sol, sabe también hacerlo de los espacios vacíos que crea la estrella.

1. Parque de El Capricho

Que el Parque de El Capricho es uno de los lugares más mágicos de Madrid es algo que ya habréis oído muchas veces. Pero más allá de ser un lugar idílico para una cita romántica, el Parque de El Capricho esconde un sinfín de sombras en las que poder disfrutar de un rato al aire libre sin salir de Madrid. Bajo sus árboles centenarios o al amparo de la sombra arrojada por las columnas del Templete de Baco, las páginas de un buen libro o una sencilla charla con un amigo ganarán considerablemente en calidad.



2. Monumento a Alfonso XII en el Retiro

Dos Felipes atrás, esto es, con Felipe IV, nacía el mítico Parque del Retiro. Unos años después (casi 300, para ser exactos) se inauguraba el monumento a Alfonso XII a las orillas del estanque. Siempre poblado por turistas y gatos, la columnata que conforma el monumento constituye uno de los lugares más interesantes para refugiarse del intenso sol madrileño en verano, en donde el aburrimiento nunca será una opción contemplando las peripecias de los intrépidos barqueros del estanque.

3. Estufa fría del Parque Juan Carlos I

No mucha gente sabe que Madrid cuenta con una estufa fría situada en el Parque Juan Carlos I. Tampoco demasiada gente sabe lo que es una estufa fría, pero a pesar de su nombre, esta construcción poco tiene que ver con ningún electrodoméstico para el hogar. La construcción de hormigón y cristal actúa de invernadero natural, sin aporte de energía, y recoge en su interior doce espacios entre los que podemos encontrar una zona de plantas acuáticas o un jardín japonés. Los muros recubiertos de trepadoras de su exterior y su microclima húmedo son un refugio perfecto para rodearse de naturaleza cuando la ciudad respira sol y calor.

4. Azca

Sin embargo, no todo iba a ser naturaleza y vegetación, ya que en una ciudad como Madrid la sombra no sólo la proyectan los árboles. El sol dibuja figuras cuando choca con los altos edificios comerciales de la zona, capitaneados por la elegante Torre Picasso. Sumido en una reforma que pretende volver a poner en valor la zona y dotarla de más zonas verdes, el espacio de rectas líneas y pronunciados puntos de fuga, colmado de superficies comerciales, constituye un cobijo solar perfecto para los más urbanitas.



5. Hermosilla, 26

Sería un tópico decir que pocos madrileños conocen este recóndito espacio en pleno barrio de Salamanca, ya que mucho se ha hablado del jardín oculto en el número 26 de la calle Hermosilla; pero al margen de la oferta de compras que podemos encontrar en este pequeño jardín, sus pequeñas dimensiones y sus frondosas paredes lo convierten en una de las opciones favoritas si estamos buscando esa preciada sombra en el centro de la ciudad, ocupada además por una divertida selección de mobiliario de jardín que el visitante podrá utilizar.

6. Jardines del Campo del Moro

Guardando las espaldas del Palacio Real, los jardines del Campo del Moro te ofrecen la posibilidad de yacer sobre el césped recién cortado y aislado por la sombra de los grandes árboles que flanquean el paseo principal o más resguardado entre la arboleda por la que discurre el paseo de Felipe V. Dos rincones perfectos para descansar de tus gafas de sol y hacer una parada para reponer fuerzas en un paseo por el Madrid de los Austrias.

7. Azotea del Círculo de Bellas Artes

Es imposible hablar de planes al aire libre con los que disfrutar algún aspecto de Madrid y no pensar en la azotea del Círculo de Bellas Artes. El edificio, punto de unión entre Alcalá y Gran Vía, cuenta con una de las mejores vistas del skyline madrileño desde su cubierta, perfectamente habilitada para el uso de los visitantes y que dispone de unos curiosos toldos que, más que parar la luz solar, la tamizan. Quizá no sea la sombra más profunda y algunos rayos del sol toquen tu piel, pero las vistas merecen la pena.
Visita virtual: Azotea del Círculo de Bellas Artes

8. El patio interior del Museo Reina Sofía

El Museo Nacional Reina Sofía guarda en su interior un inmenso patio verde en el que no sólo te protegerá la sombra de sus poblados árboles, sino las robustas fachadas del antiguo hospital general de Madrid, reconvertido en el tercer vértice del triángulo del arte de la ciudad. Si lo que buscas es inspiración, en su patio encontrarás el lugar idóneo para tomar tus apuntes y tus dibujos sin que el reflejo del sol en tu bloc de notas te dificulte la tarea.

9. Patio Nouvel del Reina Sofía

Prácticamente sin movernos de sitio, podemos experimentar otro cobertizo que se encuentra en el polo opuesto, conceptualmente hablando, del anterior. El patio Nouvel de la ampliación del Museo Reina Sofía, diseñado por el arquitecto del que toma nombre, Jean Nouvel. Rodeado de elementos metálicos y cristal, a la sombra de la inmensa cubierta que se alza sobre el edificio y acompañado de "Brushstroke" , la obra escultórica de Roy Lichtenstein que forma parte de la exposición permanente del museo, ni siquiera te acordarás de que fuera el sol baña las calles.

10. Paseo de Recoletos

Porque no es necesario irse a sitios escondidos y poco transitados para disfrutar de Madrid. Y quizá, sentado en un banco, en mitad de la arteria principal de la ciudad, seas consciente de que azotada por un sol de justicia o escondida bajo las sombras de sus centenarios árboles y monumentos, Madrid brilla con luz propia.
Autor: Alfredo Murillo (@KORTVEX)