Lo que los periodistas odian de tu departamento de Comunicación (II)

Las prácticas de muchas agencias y departamentos de comunicación no siempre resultan satisfactorias para muchos periodistas

-Mencionar que tu cliente es anunciante de la publicación a las que te diriges. Si no consigues "colar" la información de tu cliente es que la información no es relevante. Convencer al periodista de la importancia de la noticia explicando la publicidad que tu cliente invierte en la publicación, no va a ayudar.

-Poner en copia al jefe. Es el intento a la desesperada de algunos ejecutivos "senior", que se toman la licencia de recordar a tu jefe que no has publicado la noticia que llevan varios días intentándote "colar". Sin duda, perderás la confianza del periodista.



-La nota embargada. Esta práctica, en los tiempos de las nuevas tecnologías de la información y las redes sociales parece ya obsoleta. Los periódicos ya no tienen hora de cierre. La información se genera minuto a minuto.

-La exclusiva que resulta no serlo. Mandar una nota de prensa indicando en el cuerpo del mail que es una "primicia" y ver que los demás medios lo publican 1 minuto después. La confianza no se gana con manzanas envenenadas.

-La llamada de inicio de bombardeo de emails. "¿Has recibido el mail?" Muchos son los periodistas que temen esta pregunta. Y es que el temor a que ese mail se convierta en un  "bombardeo incesante" de e-mails es muy grande.

-El síndrome telediario. Aún son muchos ejecutivos de cuentas y responsables de comunicación que se saltan todos los "protocolos periodísticos" en una convocatoria de prensa cuando un equipo de una televisión o periódico nacional aparece, de repente, por su rueda de prensa. Ante esto, recuerda que ya no solo hay un telediario en España, y que los demás profesionales merecen el mismo respeto.

-Los periodistas tienen criterio. La noticia no es lo que tú o tu cliente quiere que sea noticia. Llamar a un periodista para decirle que la noticia que ha escrito no tiene valor informativo, es como decirle a un chef que su comida no se puede digerir.

-Quid pro quo. Si tú llamas con prisas para colar una nota de prensa, actúa con rapidez cuando te solicitan información. Es la queja por excelencia de los periodistas. Llamadas pidiendo un portavoz o experto de una empresa e institución que se demoran días e emails sin respuesta.

-Quiero hablar con el departamento de comunicación, no con el chico que reparte el correo. La búsqueda de un contacto del departamento de comunicación de una empresa puede ser, en ocasiones, una misión imposible. La falta de un contacto directo entorpece el trabajo, y al final, las recurrentes llamadas a las centralitas de algunas compañías terminan por ser peores que intentar cambiar de compañía de telefonía móvil.

-Pedir amistad en Facebook. No, no lo intentes por favor. Aunque pensemos que es establecer una relación más "directa" con el periodista, e intentemos ganarnos su confianza pidiéndole amistad, puede que tu intento de ser amigo del periodista consiga precisamente todo lo contrario.
Publicado: PRNoticias