El formato más habitual, porque también es el más solicitado por las empresas, es el CV estándar. Es la forma más clásica y resulta muy útil a la hora de poner en orden tus experiencias y de preparar una entrevista.
A su vez, según el orden y el contenido, el CV estándar puede clasificarse como CV Cronológico, CV Cronológico inverso, CV Funcional o CV Mixto.
Las características básicas de un CV estándar son:
- Debe presentarse en uno o dos folios, a lo sumo.
- Tamaño DINA4, por una sola cara.
- Formato texto del documento (Word o equivalente).
- Las tipografías más comunes son Times New Roman y Arial.
- La expresión tiene que ser clara, concisa y sin faltas de ortografía.
- Debe contener varios apartados y contenidos imprescindibles.
- La información más importante debe estar a primer golpe de vista en la primera página. Para ello, es importante destacar algunas palabras clave en negrita.
- Lo ideal es poner una foto tamaño carné en la esquina superior derecha.
- Se aconseja realizar un archivo pdf para fijar el formato del documento y evitar problemas a la hora de imprimir o abrir el documento.
¿Para qué sirve el CV estándar?
- Responder a ofertas de empleo que estén en curso o presentar tu candidatura a una universidad o escuela de negocios.
- Promocionar tu candidatura en aquellas empresas que hayan despertado tu interés.
- Llevar un inventario de tus mejores logros a nivel profesional, académico y en actividades destacables para poder controlar y evaluar en todo momento la dirección que está tomando tu carrera profesional.
- Preparar tus entrevistas de trabajo.
- Recordar al entrevistador los datos más importantes después de la entrevista.
CV Cronológico
Es el curriculum más extendido cuando tienes una trayectoria estable y demostrable en un campo.
Muestra tu experiencia profesional y tu formación ordenadamente, de lo más antiguo a lo más reciente, o al revés (CV cronológico inverso), de lo más reciente hacia atrás. Tiene la ventaja de dar una idea del recorrido vital de una persona.
Esta clase de CV es aconsejable siempre que marques claramente las principales responsabilidades que has ocupado y los logros que has conseguido. Es decir, que no se limite a ser una lista ordenada en el tiempo.
También deberás tener en cuenta las exigencias del puesto e intenta dar respuesta a las necesidades del empresario, identificándose con ellas. Destaca en negrita las palabras claves de datos que demuestren tu adecuación al puesto.
Pros
Un CV cronológico es recomendable…
- Si tus puestos han progresado en orden lógico, y dentro de la misma área profesional.
- Si has tenido pocos trabajos, y/o funciones siempre idénticas.
- Si no quieres cambiar de profesión o función.
Contras
- Dejar al descubierto periodos de desempleo.
- Para evitar "vacíos" en el tiempo puede incitarte a poner temas no relevantes. El empresario o persona que lo analiza, sabrá entonces cosas que no siempre serán positivas o importantes...
- Si no se personaliza para cada oferta de trabajo, puede que no responda a las dudas del seleccionador sobre la adecuación del candidato.
- Obliga al lector a extraer la información relevante para él (habilidades y conocimientos del candidato), trabajo que preferirá que le faciliten o le den hecho.
- Si has cambiado frecuentemente de puesto, profesión o empresa puede juzgarse que se es "aprendiz de todo y maestro de nada"
- Obliga al empresario a que lo analice para encontrar, cosa que no siempre está dispuesto.
- Resulta contraproducente si intentas dar un giro a tu trayectoria.
La opinión de Recursos Humanos
Los CV cronológicos son muy bien recibidos por los seleccionadores que buscan estudiar tu personalidad a través de los mismos, y aún cuando ellos dicen que pueden encontrar tus rasgos positivos, tienes que pensar que también pondrán de manifiesto los signos negativos, que suelen tener generalmente mayor peso al tomar la decisión de citar a un candidato para una entrevista.
CV Funcional
El CV funcional, o basado en tus capacidades, centra la atención en tu capacidad para cumplir las exigencias del puesto y no en tu trayectoria profesional.
Da respuesta a las necesidades que tiene el empresario identificándose con ellas y ofrece una experiencia contrastada en cada área con una eficacia probada a través de tus logros.
El CV funcional debe responder siempre a la verdad de lo que manifiesta. Aunque en este formato te resultará más fácil omitir lo que, en tu opinión, sea un punto negativo o poco relevante.
El objetivo es conseguir la entrevista. Si en ella salen esos puntos o algún defecto, tendrás al menos la ocasión de presentar tus defectos amparados en alguna virtud que lo mitiguen o lo conviertan en algo positivo.
Pros
- Centrar la atención del lector del CV en las cualidades que te convierten en el candidato adecuado para el puesto, dejando de lado que carezcas de experiencia o formación habitual.
- Posibilidad de camuflar periodos en blanco o experiencias no relevantes.
- Repetir a la empresa las habilidades o cualidades que solicitan en su oferta y la demuestras con hechos (experiencias profesionales, formación, otras actividades, etc.)
- Te permite seleccionar los trabajos y funciones que sean identificables positivamente con el puesto que solicitas.
- Impactar más con los logros dentro de sus funciones específicas, pues aún cuando en tu CV cronológico debes manifestar tus logros, estos quedan más diluidos.
Contras
- Algunos responsables de selección experimentados pueden pensar que escondes algo
- Dejar en un segundo plano empresas o universidades prestigiosas en las que has estado.
Pasos para redactar un CV funcional
1. Especifica las áreas dentro de tu profesión en las que tienes algo que contar. Por ejemplo, dentro de Banca: Banca de Inversiones, Banca Privada, Banca Comercial, Auditoría Financiera, Abogado Laboralista, Diseño Web, Marketing de consumo, etc.
2. Agrupa en cada área todas las experiencias profesionales y formaciones relacionadas: prácticas, especialidad en la carrera, colaboraciones con ONG, cursos, etc. Señala cuáles han sido tus funciones y la duración de cada experiencia.
3. Añade en cada área una línea con tus cualidades y las habilidades que has desarrollado. Por ejemplo: Auditoría: buena capacidad de análisis y de síntesis, capacidad de adaptación, trabajo en equipo, trabajo en situaciones de presión.
4. Presenta dentro de cada área un párrafo con los logros más significativos que se identifiquen con las funciones que has descrito. Por ejemplo: incrementar X puntos el nivel de satisfacción de un cliente clave, aumentar X% las ventas del departamento, desarrollar o implementar una metodología, etc.
5. Completa tu CV con los siguientes apartados:
- Historial laboral. En esta parte te limitarás a hacer una breve referencia a las empresas en que hayas realizado las funciones que señalas en tu CV. No tienen porqué ser todas en las que hayas estado y no es necesario que indiques fechas. Por idéntica razón, los cargos que ocupaste es un tema a decidir por ti a mencionar o no.
- Formación académica. Mencionar solamente la de mayor importancia y los cursos o seminarios que se relacionen con el objetivo laboral.
- Datos personales.
Consejos
- Recuerda que para hacer un buen C.V. funcional es necesario conocer muy bien el tipo de empresa en el que quieres trabajar y el puesto que deseas ocupar.
- Presenta siempre las áreas funcionales en orden de importancia que las exigencias del puesto determinen, y olvídate del orden cronológico.
CV Mixto
El curriculum mixto está concebido para tomar lo más aprovechable de las ventajas que hemos presentado del curriculum cronológico y funcional.
Si una persona ha permanecido en un puesto relevante en una empresa de prestigio, y además ha logrado obtener marcados resultados, es conveniente que lo señale incluyendo las fechas junto con las funciones desempeñadas y los logros alcanzados.
Fuente: Emplea Universia
Consejos e indicaciones para destacar en un proceso de selección
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